Análisis de Legión: La ezquifronenia de un mutante
Toda una vida puede pasar en un instante, la forma en que se percibe la continuidad puede variar y cuestionar incluso qué es el tiempo.
Naces y vives cada etapa de tu vida desempeñando un rol distinto, adaptándote a tu entorno pero siempre preguntándote si los cambios internos son lo normal o si más bien eres distinto a los demás, la serie Legión comienza con una escena inicial que posiciona la historia de David Haller (Dan Stevens) a lo largo de varias facetas de su vida, en primera instancia estamos ante tomas que nos avocan miles de interpretaciones de transiciones que juegan con determinados elementos y ante todo un punto de inicio distinto para el género de superhéroes.
Comprender la serie Legión en primera instancia puede resultar confuso o un incluso un truco algo preparado, la historia nos presenta a David Haller, un mutante que ha sido diagnosticado con esquizofrenia y que dada la incidencia de sus ataques ha sido internado.
Muchas de las tomas empiezan a recordarnos a elementos clásicos de David Lynch y cuestionan de que la serie propiamente se aleje de estándares repetidos como los de DC o Marvel genéricos y se sitúe en calidad Netflix.
No te pierdas otras críticas de series en nuestra sección especial: Críticas de series.
Encierro y humanización
Pero comencemos con la crítica de la serie Legion. Este primer capítulo transcurre en torno a la tormentosa existencia del protagonista, en cuestionar qué es real y qué no, truco que en cierta forma juega con la inteligencia del espectador pero que también puede desorientar, hasta fastidiar si lo usan en exceso.
Conocemos a Syd Barrett (Rachel Keller), una chica diferente que en desde un primer encuentro atrajo la atención de Haller y que después terminaría aceptando ser su novia. Barrett también tiene una condición y le cuesta todo lo relacionado al contacto humano, pese a ello busca la forma de relacionarse con Haller, irónicamente por primera vez en su vida el protagonista no se siente sólo, ni tampoco diferente, sino que ahora la realidad cobra un sentido y sus demonios son silenciados.
Tras varias escenas, el día que Barrett deja la institución ha llegado y con ello la ansiedad y soledad de David se plantean como un eje central, no sería hasta que por fin besaría a la chica que ocurriera algo en medio del hospital psiquiátrico, sorpresivamente David ocupa el cuerpo de Barrett y ella el de él.
Doble realidad
La última parte de los recuerdos que presenciamos de David se cuestionan en medio de un interrogatorio ejecutado por los que vendrían siendo los villanos de la serie y es aquí donde empiezan los problemas realmente. Problemas en el sentido literal y no en el de la resolución,
Legión tiene potencial para ofrecer una visión detallada, ordenada y hasta que combina algunos elementos audiovisuales en pro del guion, pero en momentos como la “huida” de David, su palacio mental y que sean un grupo de fugitivos que emplearon más de 30 trucos se pierde la coherencia de lo planteado
para lograr parecerse a un producto cómic, es decir es lógico que tiene sus referencias, pero por crear algo en pro del fandom pueden dañar todo lo logrado, ante todo con esa escena en que huyen torpemente.
De todas formas, ha sido el primer capítulo, ha sido más lo bueno que lo malo. ¿Qué les ha parecido la serie Legion?
A favor:
– Soundtrack increíble adaptado a cada escena.
– Protagónicos notables.
– Percepción de lo mutante como una enfermedad psicológica.
En contra:
– Abuso de las habilidades del protagonista.
– Grupo mutante que huye de la justicia que sortea todos los obstáculos.
– Pueden llegar a abusar de los recursos fake. (tipo Mr Robot)
Nos vemos en la próxima.
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