100 días de soledad

Año: 2016
Duración: 93 min.
País: España
Dirección: Gerardo Olivares, José Díaz
Reparto
Documentary, José Díaz
Productora
Wanda Films / Televisión Española (TVE)
Género
Documental | Naturaleza
Sinopsis
José Díaz se recluye en su cabaña en el Parque Natural de Redes (Asturias) durante un largo periodo de cien días para desconectarse totalmente del mundo de la vorágine del mundo que le rodea. No tiene electricidad, ni móvil, ni televisión, ni ordenador, ni reloj… Sólo el hombre con la naturaleza.

Crítica:
Hay mucho paisaje espectacular y preciosista.
Cuando se capta la grandiosidad de la naturaleza sin mediación humana siempre es imponente.
A veces hasta sobrecogedora. Sobre todo cuando nos sumergimos en ella en espacios que desconocemos.
José Díaz, después de una pérdida familiar, se propone el reto de vivir 100 días en completa soledad, en los valles y colinas de algún lugar de Asturias, alejado de todo contacto y relación humana. Así que La película es una descripción reiterada de él entre el entorno del bello paisaje. Por supuesto, hay mucho colorido y, mucho narcisismo. Pero la historia no propone nada, ni se acerca al alma que hay detrás de todo lo que refleja ese espectacular colorido en los sinuosos lomos de esos verdes montes. Todo queda en la imagen de la superficie y en lo superficial, aunque para el autor supusiera un baño de experiencias y sensaciones, estas no se ven reflejadas en la pantalla ni trasmitidas al espectador.
Tampoco nos puede hacer creer que es una experiencia de supervivencia en un entorno desconocido o salvaje -hecho que le daría un valor incuestionable- pero no, pues el personaje ha preparado con mucha antelación los medios para una forma de supervivencia fácil: un corral con gallinas, víveres en la cabaña, cuartel general donde ha de dormir por las noches y protegerse del frio. Además, sus familiares le depositarán semanalmente en otro lugar convenido, todo lo necesario para sus necesidades. Así que, es bonita de ver en una reunión de amigos en la cantina del pueblo, pero poco más. Debe ser una de esas experiencias que sirven al que las vive, pero que le falta estructura narrativa, emoción, estilo, imágenes novedosas y sentido del tiempo.
Por todo ello la película se convierte en una descripción paisajística sin mayor interés que eso, ver paisaje reflejado en una pantalla.

Pepe Mëndez