El rehén
Título original: Beirut
Año:2018
Duración: 109 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Brad Anderson
Guion: Tony Gilroy
Música: John Debney
Fotografía: Björn Charpentier
Reparto
Jon Hamm, Rosamund Pike, Mark Pellegrino, Dean Norris, Shea Whigham,Alon Aboutboul, Jonny Coyne, Larry Pine, Jay Potter, Ben Affan, Mohamed Zouaoui,Mohamed Attougui
Sinopsis
Mason Skiles (Jon Hamm) es uno de los diplomáticos más importantes de Estados Unidos que abandonó el Líbano en la década de los 70 tras un trágico incidente. Diez años más tarde, la CIA lo llama de vuelta a un Beirut devastado por la guerra con una misión que sólo él puede cumplir. Sin saber quién está de su lado y con vidas en juego, Skiles debe superar todos los obstáculos para exponer la verdad.
Crítica:
Una película irreprochable en su linealidad narrativa, embistiendo sin subterfugios a la suciedad y mugre que se esconde bajo muchas de las decisiones políticas de los mas grandes e importantes mandatarios que controlan nuestro pequeño mundo. Esos personajes amasan decisiones de alto voltaje que harán estallar verdaderos conflictos sin importar las víctimas, ni de que lado puedan caer estas, ya que quedarán como daños colaterales sin importar demasiado.
Mason Skiles es un respetable diplomático y un gran “mediador” que se sale de la política de altos riesgos en Oriente Medio para dedicarse a una vida más tranquila e intentar solucionar conflictos laborales entre empresas y trabajadores, o problemas sociales de otra índole, pero se ve obligado a volver al centro del conflicto político, en donde los odios son irreconciliables y las armas se oyen más que las palabras.
Brad Anderson ha construido una historia llena de tensión y de intriga, cercana al estilo argumental y literario de las novelas de John Le Carré, y aunque encontramos la parte de violencia que corresponden a estas historias, ha sabido huir de estridentes efectos especiales que hubiera atraído más a cierto sector de público, pero que seguramente hubieran podido convertir la película en otra cosa menos sólida y más caprichosa.
En cuanto a la parte actoral, el mayor acierto es haber elegido a Jon Hamm en un papel principal que borda, dándole poderío, credibilidad y seducción a un personaje que representa ser un verdadero diplomático con carisma y
corazón, aunque no por eso se le allanen los problemas para resolver el caso que le han encargado.
P. M.