Catedrática en la Universidad de Massachusetts, esta investigadora de origen italiano explicó cómo la historia del cine ha omitido representar y nombrar a sus pioneras, por lo que cada generación de cineastas ha tenido que empezar prácticamente desde cero para forjar su conciencia de género. “Estamos corrigiendo la historia. Nos sentimos mejor sabiendo que nuestras madres y abuelas hacían cine”, destacó Zecchi, que ha pasado muchas horas en las filmotecas –“son una mina”– y rebuscando reseñas en las revistas de cine para realizar este video-ensayo, que pretender recuperar el legado de Alice Guy –“experimentó con el color, la doble exposición y los efectos especiales y falleció sin recuperar la autoría de sus películas–, Elvira Notari –“realizó más de cien filmes de forma artesanal, con la colaboración de su marido y sus hijos”–, Lois Weber –“la mayoría de sus películas trataban los problemas sociales que les tocaba enfrentar a las mujeres y fue la directora mejor pagada de Universal en 1918”–, Elena Jordi –“actriz que fundó su propio teatro y dirigió Thais, que se ha perdido, y experimentó con el coloreado de los fotogramas”–, Germaine Dulac, Helena Cortesina –“con su filme Flor de España o la leyenda de un torero (1921), la valenciana se convirtió en la primera directora de nuestra cinematografía”–, entre otras muchas pioneras.

 

Montadoras, guionistas, actrices

A través de cinco apartados, el video-ensayo recoge que en el cine mundo no había prejuicios sexuales; que, entre 1890 y 1943, hubo numerosas directoras activas en Hollywood; que cuando el cine empezó a ser industria, las mujeres tuvieron mayor dificultad para encontrar su espacio; y que muchas féminas fueron expropiadas y eclipsadas por los hombres en la gran pantalla.

 

Este trabajo de rescate que está llevando a cabo Zecchi también apunta que estas pioneras olvidadas hablaron en sus películas de infidelidad, amor interracial, prostitución o malos tratos. Tras la proyección del vídeo-ensayo, Zecchi, que fue presentada por la guionista Alicia Luna, mantuvo un encuentro con el público junto a la actriz Nieve de Medina y el crítico Jordi Costa. De Medina destacó que se sigue estando “en los mismos lugares. Rara vez somos personajes principales, siempre estamos en función de algo, de ser la mujer de… la hermana de…”.

 

Jordi Costa, por su parte, resaltó los personajes femeninos “con voz y voto” interpretados por Katherine Hepburn y Barbara Stanwick, “aunque no sé cuantas de esas películas llevaban la firma de una mujer”, reconoció el crítico, que junto a Zecchi y De Medina, conversó sobre la autoría de las películas. La teoría fílmica feminista reivindica la autoría también de las guionistas, montadoras e intérpretes. “Las películas de Scorsese nos gustan ¿por qué son de Scorsese o por su montadora Thelma Schoonmaker?”, preguntó Costa. 

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