Ficha técnica.- Título original: “Love in Afternoom”. Año: 1957. Duración: 130 minutos. Producción: United Artists. Guión: Billy Wilder y I. A. L. Diamond según la novela de Claude Anet. Fotografía: William C. Mellor. Música: Franz Waxman. Dirección: Billy Wilder. Interpretes. Gary Cooper (Frank), Audrey Hepburn (Ariane), Maurice Chevalier (Claude), John McGiver (señor X), Van Doude (Michel), Lise Bourdin (mujer X), Olga Valery ( huésped ).
Argumento.- Ariane Chavasse es una inocente joven parisina, que estudia violonchelo y es seducida por un millonario norteamericano.
Comentario.- Billy Wilder, el mejor director de comedias de la historia del cine, escribió, en su primera colaboración con el guionista I.A.L. Diamond, esta comedia romántica de ambiente parisino, en la que mediante una preciosa fotografía de William C. Mellor, podemos disfrutar de la inigualable capital francesa a la que Wilder dedica un homenaje: su ambiente callejero, la plaza Vendome, el hotel Ritz, o la Rue Mallenbranche… y además escuchamos la bella banda sonora del clásico Franz Waxman, autor de otras tan importantes como las de “Sospecha” o “Rebeca” ambas de Alfred Hitchcock, en esta ocasión podemos disfrutar de un cuarteto zíngaro interpretando el vals vienés “Fascinación”, con ellos Wilder rueda momentos muy divertidos, que culminan con la secuencia antológica de la mesita rodante. Ariane es la historia de un amor loco, un amor imposible entre una joven e inocente parisina y un millonario de edad madura, crápula, cínico y vividor, ella sabe que se ha enamorado de un hombre que solo la amará fugazmente pero está dispuesta a sacrificarlo todo en aras de ese amor. La película se resiente algo por la interpretación de Gary Cooper que no está a la altura de su categoría, excesivamente mayor para su personaje, resulta literalmente barrido de la pantalla por la extraordinaria Audrey Hepburn, un prodigio de actriz, una de las mejores de la historia, con su dulce belleza y sus maravillosos ojos. Wilder en un golpe genial, acaba su obra maestra con una secuencia para la eternidad: Estamos en una estación de ferrocarril, es verano, pero el ambiente es neblinoso con una lluvia fina que anuncia melancólicamente la llegada del próximo Otoño, la pareja llega al vagón del tren y ella le pide la flor de su ojal, como recuerdo de unos días maravillosos, en el estribo, él parece que no quiere irse, el tren arranca y en un instante mágico de una gran emoción, Frank coge a Ariane, la sube al tren y ya en su departamento la besa apasionadamente, el tren se aleja y en el andén mojado por la lluvia caída, el cuarteto de músicos interpreta una vez más “Fascinación”. THE END. ¡HONOR Y GLORIA ETERNOS PARA BILLY WILDER!.
Ariane Love in the afternoon 1957 réal : Billy Wilder Audrey Hepburn Collection Christophel
Anecdotario.- La película fue un fracaso de público, pues los espectadores americanos consideraron que Gary Cooper – tenía 56 años –era demasiado viejo para tener un romance con la jovencísima Audrey Hepburn que tenía 27, ese fue el motivo por el que el famoso actor y galán Cary Grant rechazó el papel de protagonista. En el final original los dos amantes hacían el amor, pero fue cambiado debido a las protestas de La Legión Católica de la Decencia. Gary Cooper fue una de las más grandes estrellas de “la época dorada”, trabajó siendo joven en el rancho de sus padres mientras estudiaba en la escuela y tuvo un accidente de coche que le afectó la cadera y le proporcionó una peculiar forma de andar, abandonó sus estudios para irse a Hollywood donde debutó en el cine en 1925 – tenía 24 años -, alto y desgarbado gozaba de un estilo sobrio y natural a la hora de interpretar, ganó el Oscar de mejor actor en 1941 por “El sargento York”, de Howard Hawks y en 1952 por el western “Solo ante el peligro”, de Fred Zinneman, donde por primera vez aparecía la figura de un sheriff que tenía miedo y estuvo nominado en 1936 por “El secreto de vivir”, de Frank Capra, en 1942 por “El orgullo de los yanquis”, en 1943 por “Por quién doblan las campanas”, ambas de Sam Wood y en 1960 se le concedió el Oscar de Honor “Por sus muchas y memorables interpretaciones y por su aportación a la industria del cine”, fue además el prototipo del ciudadano americano medio, solo se casó una vez, aunque el gran amor de su vida fue la bella actriz Patricia Neal, con la que actuó en la obra maestra “El manantial” y no se casó con ella porque su esposa se negó a concederle el divorcio, en 1954 trabajó junto a la española Sara Montiel en el magnífico western “Veracruz”, era un adicto al tabaco y murió relativamente joven a los 60 años como consecuencia de un cáncer. Audrey Hepburn nació en Bruselas (Bélgica), y está considerada como una de las actrices con más estilo de la historia del cine, debutó en Hollywood en 1953 con 24 años en “Vacaciones en roma”, de William Wyler junto a Gregory Peck, tuvo un gran éxito y se le concedió el Oscar, y el nombramiento de actriz revelación del año y estuvo nominada en 1954 por “Sabrina”, de Billy Wilder, en 1959 por “Historia de una monja”, de Fred Zinneman, en 1961 por “Desayuno con diamantes”, de Blake Edwards y en 1967 por “Sola en la oscuridad”, de Terence Young. Maurice Chevalier nació en Paris, destacado cantante y bailarín, se hizo popular en el cine donde siempre apareció vestido de smoking y tocado de un sombrero canotier, estuvo nominado al Oscar en 1930 por “El desfile del amor” y por “El gran charco” y en 1959 se le concedió el Oscar de Honor, actuó en películas musicales tan famosas como “Gigi”, en 1958 y “Can, can”, en 1960. Franz Waxman, nacido en Alemania de ascendencia judía, uno de los mejores compositores de bandas sonoras de la historia del cine, nominado al Oscar en 12 ocasiones, lo ganó en 1950 por “El crepúsculo de los dioses” ,de Billy Wilder y en 1951 por “Un lugar en el sol”, de George Stevens y entre sus grandes bandas sonoras: “Rebeca” y “La ventana indiscreta” ambas de Alfred Hitchcock o “Traidor en el infierno”, de Billy Wilder. William C. Mellor fue un gran director de fotografía ganador del Oscar en 1951 por “Un lugar en el sol” y en 1959 por “El diario de Ana Frank” ambas de George Stevens y estuvo nominado en 1958 por “Vidas borrascosas”, de Mark Robson y en 1965 a título póstumo por “La historia más grande jamás contada”, de George Stevens, pues murió de un ataque al corazón durante el rodaje de esta película.
